Guía para limpiar tu teclado
La mayoría de nosotros utilizamos nuestros ordenadores todos los días, bien para trabajar o bien para el ocio. Por ello, es normal que la suciedad acabe por aparecer en los teclados, ya que son (junto al ratón) los elementos que más tocamos y, muchas veces, comemos o bebemos sobre ellos, por lo que pequeñas partículas se pueden colar entre las ranuras. Lo más recomendable para evitar esto es realizar pequeñas limpiezas rutinarias y en este blog vamos a enseñarte cómo limpiar tu teclado de forma correcta. ¡Anota!
Limpiar un teclado mecánico
Limpieza básica
Para limpiar tu teclado lo primero que debes hacer es apagar tu ordenador y desconectar el teclado; en caso de ser un teclado inalámbrico, sácale las pilas. Ahora, dale la vuelta y deja que la suciedad vaya cayendo, para lo que puedes darle unos ligeros golpes (ojo, con mucho cuidado).
Para retirar el polvo, puedes usar un aspirador con la boca fina y estrecha, presionando suavemente las teclas para que el polvo y otros restos se retiren de forma correcta. También existen aspiradoras pequeñas para este tipo de aparatos. Y, aunque muchos lo utilizan, no recomendamos especialmente hacer uso de botes de spray comprimido, ya que la temperatura del aire liberado y la condensación pueden dañar el teclado. Si aún así decides utilizar esta alternativa, inclina un poco el teclado y dirige la boquilla hacia las teclas, de manera que el chorro de aire no dé de frente; presiónalo poco a poco y a cierta distancia.
La superficie del teclado puede ser limpiada con un paño de microfibras (para que no deje pelusas) ligeramente humedecido, frotando un poco. Es importante que lo seques con otro paño y que te asegures de que está completamente seco antes de volver a conectarlo. Puedes ayudarte de un hisopo húmedo para acabar con la suciedad más resistente; en caso de empaparlo en alcohol, ten cuidado de no borrar las letras de las teclas.
Limpieza profunda
Si buscas realizar una limpieza más profunda, necesitarás un extractor para retirar las teclas una a una. Es un proceso un tanto tedioso, pero el resultado valdrá la pena. Ponlas en remojo durante unas horas en agua tibia con jabón u otro producto adecuado y, después, colócalas en un sitio limpio para que se sequen. Puedes ayudarte de un trapo para sacarles el líquido sobrante. Mientras, utiliza un cepillo de cerdas, un cepillo de dientes o un hisopo para limpiar la base del teclado, frotando suavemente. Y mucho cuidado al utilizar paños humedecidos, recuerda secar todo de manera correcta con otro paño diferente.
Cómo limpiar líquidos
Si derramas agua sobre el teclado, desconecta inmediatamente para evitar cortocircuitos, gira el teclado para que el líquido salga y deja secar al aire durante unas horas. Puedes retirar el exceso de agua con un paño seco, pero asegúrate de no conectar el teclado hasta que esté completamente seco.
En caso de volcar otros líquidos, como refrescos o café, debes llevar a cabo una limpieza más exhaustiva.
Limpiar un teclado de ordenador portátil
Limpiar el teclado de un ordenador portátil puede parecer más laborioso, ya que hay menos ranuras entre las teclas. Primeramente, debes apagar el portátil y, después, gíralo para que la suciedad caiga (con mucho cuidado). Puedes aplicar aire a presión para ir eliminando los restos, siguiendo el mismo procedimiento que en el caso de los teclados mecánicos, y ayudarte de un paño de microfibras para ir limpiando poco a poco las teclas y el marco exterior del teclado. Como existen zonas más estrechas y dificultosas, puedes usar un hisopo humedecido con alcohol para limpiar las ranuras y que la limpieza sea más completa. En el caso de los teclados de membranas o de teclas no extraíbles, el proceso de limpieza es el mismo.
La cuestión de la limpieza de líquidos en un portátil es algo más peligrosa que en un teclado mecánico. Lo principal es apagar el ordenador inmediatamente, dale la vuelta y deja que escurra todo el líquido posible. Seca con un paño de microfibras y deja que se seque un mínimo de veinticuatro horas (aunque, si puedes, lo ideal sería dos días). Mientras se seca, ciérralo, pero coloca un paño de microfibras entre la pantalla y el teclado para que absorba posibles humedades.
Como has podido observar, para mantener tu teclado limpio y en buenas condiciones basta con realizar pequeñas limpiezas rutinarias. Una limpieza más profunda no es tan habitual y llega con llevarla a cabo cada pocos meses. Con esto conseguirás que tu equipo dure más tiempo y que siempre parezca como nuevo.
No te olvides de consultar nuestro blog para leer más consejos útiles y contacta con nosotros en caso de duda.
